¡Esta receta es la leche!

19.03.2021

LECHE FRITA

Para el rebozado:

Preparación

1.- Corta unas tiras de piel de naranja y de limón con un pelador.

2.- Aparta aproximadamente un vaso de la leche y resérvalo en el frigorífico.

3.- Vierte el resto de la leche en un cazo. Añade las pieles de limón y naranja, la ramita de canela y el azúcar. Pon el cazo en el fuego. Baja el fuego cuando veas que la leche empieza a hervir y deja el cazo en el fuego 10 minutos más para que la leche tome todos los sabores. Deja que hierva muy despacito. Después, retira el cazo del fuego.

3.- Añade la maicena a la leche fría que habías reservado y remueve hasta que se disuelva.

4.- Cuela toda la leche en una cazuela a parte y añade la leche en la que has disuelto la maicena. Mezcla bien y llévala al fuego para que espese sin dejar de remover. Retira el cazo del fuego cuando hayas obtenido una textura muy cremosa.

5.- Vierte la mezcla en una bandeja para que se enfríe y cúbrela. Deja que se enfríe por completo, primero a temperatura ambiente y, después, en el frigorífico durante toda la noche.

6.- Corta las porciones del tamaño que quieras con un cuchillo y, con mucho cuidado, ve sacándolas de la bandeja.

7.- Reboza la leche frita. Prepara un plato con harina y otro con huevos batidos.

8.- Fríe la leche frita. Calienta abundante aceite en una sartén. Reboza los trozos de leche frita primero por harina, y luego por el huevo batido. Pon la leche frita en la sartén cuando el aceite esté bien caliente. Dales la vuelta hasta que se dore por todas las caras y retíralas a un plato.

9.- Finalmente, reboza con un poco de azúcar. 

¡Que aproveche!